Mañihuales
Villa Mañihuales está en el corazón de un «bosque siempre verde montano»: coigüe, tepa, lenga, ñirre, calafate, maqui, chilco. Belleza imponente, ahí, al alcance de la mano. En 1970, efectuaron plantaciones de pino oregón y larix, y no sabemos por qué. Las enormes montañas que circundan los valles de los ríos Mañihuales y Ñirehuao, que confluyen cerca de la villa, albergan fauna silvestre como el zorro colorado, el chingue, el puma e, inclusive, el huemul. Entre las aves: cóndor, águila, cernícalo, y los pequeños chucao y pitío. El martín pescador aún sobrevive.
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juan gomez aguilar